Fábulas de Tamalameque Manuel Zapata Olivella; ilustrador Rafael Yockteng
- Primera Edición
- 105 Páginas Ilustraciones 17 cm
- Libro al viento; 140 .
Circulación gratuita
Página 13. Los animales hablan de paz -- Página 18. Los grandes preparativos -- Página 20. Los mensajeros por aire , mar y tierra -- Página 24. Tamalameque, ciudad cosmopolita -- Página 27. Tía Ballena causa temor -- Página 31. El desarme de los violentos Página 34. Banderas y saltimbanquis -- Página 38. No hay peor ciego que quien no quiere ver -- Página 40. Las osas danzarinas y la censura -- Página 43. Los monos parlanchines -- Página 45. El cangrejo que se saca el ojo -- Página 48. Los músicos de Tío Grillo -- Página 51. Golpes prohibitivos -- Página 54. El gran caparazón de tortuga -- Página 57. El palco elevado de Tía Jirafa -- Página 58. Tía Ballena escucha desde su piscina -- Página 60. Las acusaciones al hombre -- Página 65. Tía Pulga se incomoda con el calor -- Página 67. La protesta del Oso Hormiguero -- Página 69. La higiene de Tía Zorra -- Página 70. Tío Conejo abre el debate -- Página 74. La muerte burlona -- Página 77. Tía Hormiga condena la pereza -- Página 80. Tío Tigre protesta por el engaño -- Página 82. Abuso de hospitalidad -- Página 85. Los huérfanos claman justicia -- Página 90. Las orejas largas de Tío Conejo -- Página 95. Los arrepentimientos de Tío Burro -- Página 99. Perro hace la defensa del Hombre -- Página 100. El hombre pide la palabra -- Página 102. La prueba de la gran jaula de acero
El primero es que cada fábula se puede leer como un capítulo de una historia más grande, de tal manera que conforman al tiempo una novela para niños: la reunión de todos los animales para concertar la paz entre ellos, un tema muy Colombiano que estaba en la agenda nacional para la época en que se escribió este libro. El segundo es la inclusión del lugar geográfico, con especies vegetales y animales de la región de Tamalameque, en el Cesar, así como algunos rasgos de la cultura local.